6.12.12

Kylmä Oppiminen

¡Heeey! ¿Qué tranza banda? Hoy es un día muy chingón por muchas razones. Disfruté de un amanecer a toda madre, conviví con la familia, caminé como de costumbre un buen rato y por todo lo que falta.

Mientras regresaba a casa pensaba en tantas cosas... A veces ensimismado en estupideces, a veces meditando cuestiones profundas... Como: ¿Cuando veré emerger de la tierra a una tortuga ninja?

Entre todo, me acordé de Finlandia.

Tengo un gran  deseo de conocer los paises nórdicos desde hace años. Antes sentía una tremenda obsesión por Noruega por podridos black-metaleros motivos pero con el tiempo, de Noruega salté imaginariamente a Finlandia.

Hace poco tiempo, mientras leía artículos acerca de la demografía, política, geografía entre otros aspectos del país, me topé con el más importante de todos ellos y le di un breve repaso. Su educación.

¡No mames! Mis respetos. Finlandia hasta entonces sólo era un país que para mí se caracterizaba por su enorme armonía y radiante paz. Un lugar para vivir plenanente. Resulta que también tienen un nivel de cultura bien simentado que es digno de ser estudiado por todos nosotros.

Su gente está comprometida de lleno con el estudio pues aprendió a amarlo gracias a su alta calidad y al cuerpo docente encargado de impartir el saber; no lo sobrelleva a regañadientes como en muchos paises hacemos generalmente. Esto es un aspecto positivo remarcable que podemos intentar aprender también.

Incluso banda como la que a continuación les muestro está capacitada para labores de importante nivel... o ¿será que estos weyes representan el ínfimo .4% de la gente que no termina su nivel básico-obligatorio de estudios?



The Dudesons


Total. Ya que les cuento acerca de Finladia y su educación, les mencionaré que el estado absorbe al 100% los "gastos" del estudiante. Ejemplo: Si yo viviera en Finlandia pagaría 0$ por recibir estudios, útiles, seguro médico eficaz y comida dentro de las instalaciones; incluso transporte en caso de que resida lejos de la escuela (a 5km de distancia o más).

El principio que maneja su gobierno para con la educación es: "Igualdad y equidad".

En Finlandia, ser profesor es bastante respetable. RESPETABLE ya que los maestros tienen el deber moral de guiar al alumno hacia el umbral del correcto pensar mediante herramientas culturales e integrales porque existe un verdadero interés. No califican con cifras al alumno pues les resulta una práctica innecesaria y carente de beneficio. Tampoco crean tensión ni nulidad por los fracasos. Orientan al estudiante, le ayudan a entender que de verdad es más importante forjar valores, trabajar en equipo; que el bienestar común es la finalidad y no el convertirse en un puto magnate sin corazón. También brindan al estudiante una gran libertad científica. Suelen manejar la filosofía que a la letra dice: "A veces menos es más".

En pocas palabras, son personas cálidas que hacen sentir a los alumnos como en casa. Allá los chamacos dicen: "Quiero ser profe" en vez de elegir una profesión u oficio como bombero o Superman.

El sistema educativo Finlandés está basado en la confianza. ¡Si! en la confianza. No pagan una millonada en inspectores, sindicatos y esas jaladas. No. Saben que la sociedad confía en la educación, en su sistema. Los profesores saben que no tienen a nadie arriba o detrás diciéndoles que hacer por lo que demuestran su valía mediante un desempeño pulcro y ejemplar.

"Cada alumno es importante"

"Un alumno feliz con la libertad para desarrollarse a su ritmo, adquirirá fácilmente los conocimientos"-Dice el director del colegio Ninivaara en Juensuu, Esa Raty; quien comparte su sentir que no es propio o local sino, federal...

Bueno, si es que este termino aplica en Finlandia.

Bellos conceptos como tales son los que se han sembrado en la mente de cada estudiante y maestro.

Finlandia se dio cuenta que no podía dejar a ningún niño atrás porque era necesario que hiciera parte de la gran riqueza de su país.


Cabe recalcar que también se dio cuenta de la importancia que sus migrantes tienen por lo que les brinda cursos intensivos y gratuitos de finés.

¡Órale, yo quiero!

Con todo esto no quiero que se mal interprete mi post. Amo a mi país, México. Al chile, para que les miento pero también reconozco que algo podemos aprender de aquellos que emiten una luz potente y van dejando un muy buen legado al mundo.

Les dejo un documental muy interesante. Dura poco así que dedíquenle un rato nada más. Seguro que les va a gustar.


Documental

Nos vemos de rato, si les gustó esto no olviden suscribirse y compartirlo con más banda.

Ahí se ven.



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